Deja vu

Original: http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%A9j%C3%A0_vu

El término déjà vu (en francés «ya visto», también paramnesia) describe la experiencia de sentir que se ha sido testigo o se ha experimentado previamente una situación nueva. Este término fue creado por el investigador psíquico francés Emile Boirac (1851-1917) en su libro L'Avenir des Sciences Psychiques, basado en un ensayo que escribió mientras estudiaba en la Universidad de Chicago.

La experiencia del déjà vu suele ir acompañada por una convincente sensación de familiaridad y también por una sensación de «sobrecogimiento» o «extrañeza». La experiencia «previa» es con frecuencia atribuida a un sueño, aunque en algunos casos se da una firme sensación de que la experiencia «ocurrió auténticamente» en el pasado. La experiencia de déjà vu parece ser muy común. En estudios formales, el 70% o más de la población afirma haberlo experimentado al menos una vez [1]. También se encuentran referencias a la experiencia de déjà vu en literatura del pasado, lo que indica que no es un fenómeno nuevo. Sin embargo, es extremadamente difícil invocar la experiencia del déjà vu en laboratorio, haciendo que se realicen pocos estudios empíricos.

Investigación científica

El déjà vu ha sido sometido en años recientes a seria investigación psicológica y neurofisiológica. La explicación más plausible, de acuerdo a científicos expertos en estos campos, es que el déjà vu no es un acto de «precognición» o «profecía» sino en realidad una anomalía de la memoria: la impresión de que una experiencia está «siendo recordada», cuando no es así. Esto es hasta cierto punto corroborado por el hecho de que en la mayoría de los casos la sensación de «recuerdo» en el momento es fuerte, pero cualesquiera circunstancias de la experiencia «previa» (cuándo, dónde y cómo ésta ocurrió) resultan bastante inciertas.

Asimismo, a medida que el tiempo pasa, los sujetos pueden exhibir un fuerte recuerdo de haber sufrido la «perturbadora» experiencia de déjà vu en sí misma, pero ningún recuerdo de los sucesos o circunstancias específicas que estaban «rememorando» cuando tuvieron dicha experiencia, lo que particularmente puede ser el resultado de un solapamiento entre los sistemas neurológicos responsables de la memoria a corto plazo (sucesos que se perciben como pertenecientes al presente) y los responsables de la memoria a largo plazo (sucesos que se perciben como pertenecientes al pasado).

Relaciones con desórdenes

Se ha encontrado una correlación clínica entre la experiencia de déjà vu y desórdenes tales como la esquizofrenia y la ansiedad, y la probabilidad de sufrirlas se incrementa considerablemente en sujetos que están en tales condiciones. Sin embargo, la asociación patológica más fuerte del déjà vu es con la epilepsia del lóbulo temporal. Esta correlación ha llevado a algunos investigadores a especular que la experiencia de déjà vu es posiblemente una anomalía neurológica relacionada con descargas eléctricas indebidas en el cerebro.

Así como la mayoría de la gente sufre un episodio epiléptico leve (léase no patológico) regularmente (por ejemplo, la repentina "sacudida" que ocurre con frecuencia justo antes de caer dormido o sacudida hipnagógica), se ha conjeturado que una (leve) aberración neurológica similar ocurre en la experiencia de déjà vu, dando como resultado un «recuerdo» erróneo.

Parapsicología El déjà vu se asocia con la precognición, la clarividencia o las percepciones extrasensoriales, y se lo cita frecuentemente como evidencia de aptitudes «psíquicas» en la población en general. Explicaciones no científicas atribuyen la experiencia a una «profecía» o «visión» (más comúnmente recibida a través de un sueño), o alternativamente a una experiencia sufrida en una vida anterior relacionada a una reencarnación.