Ubican en Chihuahua fósil de nodosaurio

Original: http://www.elnorte.com/ciencia/articulo/732679/

Abr 5, 2007

El fémur fosilizado de un nodosaurio, hallado en la zona de Los Altares, es la primera evidencia de esta especie en el País.

Paleontólogos descubren también vestigios de peces, un cocodrilo y árboles del periodo Cretácico

Ciudad de México  (5 abril 2007).-  Fósiles de un dinosaurio de la especie nodosaurio, caracterizado por una coraza exterior y potentes espinas óseas, fueron localizados el 12 de marzo por un grupo de paleontólogos mexicanos en la despoblada región de Los Altares, en Chihuahua.

Habitantes de la zona norte de México durante el Cretácico, hace 65 millones de años, esos dinosaurios acorazados y herbívoros de 7 metros de largo y 2 de alto habían dado muestras de su presencia en Canadá y Estados Unidos; pero a partir de este hallazgo se confirma por primera vez su paso por tierras mexicanas, señala el biólogo José Rubén Guzmán Gutiérrez, jefe del Departamento de Paleontología de la Secretaría de Turismo de Aguascalientes y coautor del hallazgo.

Decenas de fósiles de nodosaurio y otros dinosaurios —entre ellos hadrosaurios "pico de pato"— fueron ubicados por el equipo formado por Guzmán Gutiérrez, 3 geólogos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), encabezados por el ingeniero Francisco Palomino Sánchez, jefe del Laboratorio de Petrografía y Paleontología, y 4 investigadores del Museo del Desierto de Coahuila, comandados por el maestro en ciencias Héctor Rivera Sylva, jefe del Departamento de Paleontología del recinto.

En la primera campaña de prospección del proyecto "Fauna cretácica de la región Desierto de Coahuila", realizada el mes pasado en zonas áridas de Chihuahua y Coahuila, los paleontólogos encontraron valiosos vestigios a flor de tierra, sin necesidad de excavar.

"Del 10 al 16 de marzo realizamos la primera campaña de prospección, un recorrido por Chihuahua y el desierto de Coahuila para ubicar futuras zonas de excavación del proyecto faunístico. En ambos sitios encontramos fósiles en la superficie del suelo, que pueden verse a simple vista junto a las piedras erosionadas y no requieren excavación", señala Guzmán.

El nodosaurio era pariente de los ankylosaurios, animales muy pesados y anchos, con espinas en el cuerpo y, algunos, en la cabeza.

El nodosaurio fue uno de los últimos dinosaurios que existieron en el planeta. De cuello corto y cola larga y puntiaguda, su coraza estaba formada de placas, escudos y espinas, mientras su cabeza triangular se protegía con placas óseas que encajaban entre sí como piezas de un rompecabezas.

"Además de esa gruesa armadura, tenía otro medio de defensa en sus costados: dos hileras de agudas espinas óseas que sobresalían como barreras de lanzas. Éstas servían para proteger su vientre, blando e indefenso", explica Guzmán.

El nodosaurio avanzaba sobre cuatro robustas patas, de las cuales los paleontólogos localizaron la parte de un fémur, 2 placas óseas, 6 osteodermos (o escudos óseos) de diferentes tamaños y una púa ósea del nodosaurio.

Cocodrilo gigante en Coahuila

Tras el éxito en Chihuahua, los paleontólogos siguieron su expedición en Coahuila, donde descubrieron otros importantes fósiles, entre ellos los restos de un cocodrilo gigante, quizá del género Deinosuchus, un reptil que medía hasta 16 metros de longitud, y el cual es el primero descubierto en Coahuila y el segundo hallado en México.

"Es un cocodrilo muy importante, que rivalizaba con los dinosaurios y quizá se alimentaba de algunos de ellos. De este cocodrilo se conocen fósiles localizados en el Parque Nacional Big Bend de Texas, Estados Unidos, una región fronteriza con México. Este hallazgo nos permite completar fósiles de estos animales del Cretácico del lado de nuestro País", detalla Guzmán.

Considerado el cocodrilo más grande de todos los tiempos, el Deinosuchus vivió en donde hoy son los estados de Montana y Texas, en Estados Unidos.

"Ahora sabemos que también habitó en Chihuahua y Coahuila, hace aproximadamente 75 millones de años, durante el periodo Cretácico de la era Mezozoica. Fue contemporáneo de los últimos dinosaurios y se extinguió hace 65 millones de años, al final de la era Mezozoica", explica el paleontólogo.

Otros fósiles relevantes localizados en esta primera primera campaña pertenecen a un pez, posiblemente del género Lepidotes, que pudo medir hasta 2 metros de longitud y se caracterizaba por tener fuertes escamas, ojos prominentes y una serie de dientes trituradores con los que consumía principalmente moluscos.

"Localizamos escamas de este pez raro y con dudoso registro en México, además de dientes de tiburón; pero en todos los casos estamos en una etapa preliminar de análisis de los fósiles", señala Guzmán.

También en Coahuila, los paleontólogos ubicaron decenas de árboles de unos 70 millones de años.

"Creemos que son del género Javelinoxylon y que pudieron formar un bosque, pues están diseminados, algunos de pie y otros trozados por el paso del tiempo y de eventos naturales", destaca Guzmán, cuyo grupo recurrirá a expertos en paleontología vegetal para profundizar los estudios de estos árboles.

Centran búsqueda en Coahuila

El proyecto "Fauna cretácica de la región Desierto de Coahuila" centrará la búsqueda de fósiles en ese estado.

"Vamos a trabajar más en Coahuila porque está más cerca del Museo del Desierto, que es la base de operaciones del proyecto, y porque tenemos mayores facilidades con el Centro INAH Coahuila", explica el paleontólogo José Rubén Guzmán, quien no elimina la posibilidad de excavar más adelante en Chihuahua.

"No descartamos seguir trabajando en Chihuahua, pero será posteriormente, de acuerdo con el Centro INAH Chihuahua, o bien en el área protegida Cañón de Santa Elena, dependiente de la Semarnat", advierte.