Original: http://www.elnorte.com/internacional/articulo/661932/default.asp?PlazaConsulta=elnorte&DirCobertura=
Londres, Inglaterra (10 agosto 2006).- La Policía británica desbarató hoy lo que describió como un complot para hacer explotar aviones en pleno vuelo entre Gran Bretaña y Estados Unidos, y dijo que había detenido a 21 personas.
En Estados Unidos, el Secretario de Seguridad Interior, Michael Chertoff, señaló que el frustrado plan estaba en las últimas etapas de planeación y que podría tratarse de un complot de Al-Qaeda, aunque aún no hay información concluyente al respecto.
Informaciones no confirmadas de algunos medios dijeron que el plan era atacar de seis a diez aviones.
"Estamos convencidos de haber frustrado un plan elaborado por terroristas para causar un número de muertes y destrucción incalculables", señaló el subjefe de la Policía de Londres, Paul Stephenson. "Dicho simplemente, pretendía ser un asesinato masivo a una escala inimaginable", agregó.
Tanto Gran Bretaña como Estados Unidos incrementaron la seguridad, provocando importantes retrasos en los aeropuertos tras la revelación de la conspiración, en la que según una fuente de la Policía se creía que se iban a utilizar artefactos con productos químicos líquidos.
El jefe de la Policía antiterrorista de Londres, Peter Clarke, dijo que el complot tenía "dimensiones mundiales". Clarke sostuvo que la cantidad de vuelos, destinos y horarios están bajo investigación.
El Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos elevó el nivel de amenaza para todos los vuelos comerciales y las autoridades estadounidenses prohibieron llevar líquidos, incluidas bebidas, en todos los vuelos del país.
Los servicios de seguridad británicos incrementaron el nivel de amenaza del país a "crítico" desde "severo", el más alto de sus cinco categorías, que significa que se espera un ataque de forma inminente.
La alerta por seguridad se produce 13 meses después de que cuatro extremistas islámicos británicos mataron en atentados suicidas a 52 personas e hirieron a unas 700 en la red de transportes de Londres.
Se desconocía la nacionalidad de los detenidos. Los arrestos se realizaron en Londres y en Birmingham, la segunda mayor ciudad de Inglaterra.
El mes pasado, la red Al-Qaeda llamó a los musulmanes a combatir a todos quienes apoyan los ataques israelíes contra Líbano y advirtió sobre más ataques a menos que las fuerzas estadounidenses y británicas se retiren de Iraq y Afganistán.
Suspenden vuelos
El operador aeroportuario británico BAA dijo que había pedido que se suspendieran todos los vuelos procedentes de Europa con destino el aeropuerto internacional de Heathrow, el principal de Londres, donde nuevas medidas de seguridad provocaron grandes retrasos.
Las acciones de las aerolíneas europeas se desplomaban tras conocerse las noticias, con British Airways perdiendo casi un cinco por ciento. La libra esterlina también caía frente al dólar y el euro.
Las aerolíneas dijeron que no autorizarían la introducción de equipaje de mano en ninguno de sus aviones que salieran de aeropuertos británicos, prohibiendo todo artículo eléctrico o alimentado con baterías, incluyendo computadoras portátiles y teléfonos celulares.
Largas filas se formaban en el aeropuerto Heathrow en Londres mientras los pasajeros eran sometidos a exhaustivas inspecciones.
"Yo era asistente de vuelo. Estoy acostumbrada a las demoras, pero ésta es una demora de otra clase", dijo Gita Saintangelo, de 54 años, una estadounidense que regresaba a Miami. "Escuchamos sobre esto en la televisión, así que vinimos un rato antes y elevamos una plegaria", agregó.